Hoy tenía pensado subir al pulpito del Preikestolen. Me levanto como cada día a las 7’30 y en 40 minutos estoy listo para la caminata hacía el puerto que dista 1 km. Hoy desayunaré en el centro de la ciudad…pero imposible. Vueltas y más vueltas buscando un bar o restaurante abierto, pero aquí abrían a las 11:00 de la mañana. Tan solo están abiertos 7 Eleven y McDonald’s.
Son las 10 de la mañana y los bares siguen cerrados mientras McDonald tiene colas, especialmente de jovencitos, para comer el asqueroso macburguer. Aquí como en todo el norte lo que más precia son las patatas fritas, los mac… las pizzas que solo ver la pinta que tienen ya te tiran para tras y las lasañas … y así incrementan la población de gordos … al verlos otro mito se derrumba, el de los vikingos atléticos y salvajes, ávidos de acción y de sangre… ahora fofitos ávidos de hamburguesas americanas y pizzas pintadas de rojo (un extraño rojo que poco tiene que ver con el tomate) …
Hay varias excursiones organizadas desde Stavanger; puedes ir en barco, luego acercarte en bus y el restante, una subida que te supone dos horas de caminata por una pendiente de 600 metros. También hay bus directamente desde Stavanger, unas tres horas de bus hasta el inicio de la caminata.
La oferta es variada inclusive un viaje de “aventura” especial para abuelos o al menos, abuelos eran todos los que iban.

Te suben en unas zodiac ataviado con salvavidas y vestimenta anti humedad y vas sentado en unas sillas, una veintena por zodiac. La aventura estriba en dar una vuelta por el Preikestole a gran velocidad. A eso le llaman “Safari Preikestolen” lo de safari me imagino por las ballenas que no se ven o las focas que no aparecen. Los abuelos ya no son lo que eran… la época del abuelo en silla de ruedas con las patitas enfangadas en la mantita han pasado a la historia. Ahora te pueden llevar en silla de ruedas hasta en una jaula para que veas los tiburones. Así, cuando la pifies, ya no te sorprenderá nada de lo que puedas ver en cielo habiendo vivido la experiencia de subir al Preikestolen o al Everest o conviviendo con la dentadura de un tiburón a 50 centímetros de tu cara … todo ello en silla de ruedas…
El problema del pulpito es que está tan concurrido que arriba hay caravanas de espera para pasar al pulpito, lo mismo que en el Everest que estos días pudimos ver como una caravana de supuestos alpinistas esperaban arriba el turno para hacerse el selfie en el pináculo del mundo… Así que te aconsejan ir de noche – sobre las 1 o 2 de la mañana – para llegar bien temprano, pero a esa hora y aunque la noche aquí nunca es noche del todo, te recomiendan llevar un guía.
En la oficina de turismo unos guiris contratan el viaje en helicóptero para el pulpito… alucinante a lo que llegan algunos por un selfie. En España no nos quedamos atrás; hace poco leí en el periódico que uno de Segovia o de por ahí, por hacerse un selfie sentado en al borde del pulpito, fue llevado directo al cielo por una ráfaga de viento. Eso sí previa hostia de 500 metros de altitud… Así que decidí ver el pulpito desde abajo.
El viaje por el fiordo del preikestolen dura dos horas en barco; son 41 km por 600 de profundidad. Así que, a por el ferry, y no me arrepiento.
En compañía de una turba de rusos y a la hora acordada el barco sale para el preikestole. Una pareja de rusos de aspecto jubilado decide sentarse sobre un saliente del barco para lo cual se encaraman al sitio. Para mis adentros pensaba… hay que ser memo para hacer eso porque un desequilibrio y te resbalas al mar. Al poco aparece el capitán y pide que bajen. Seguramente el ansiolítico que tomaban les hacían sentirse Peter Pan, con 60 años. Poco después empiezan la tanda de selfis. El tipo apoya la cámara sobre el mismo sitio donde antes se había encaramado, la superficie, sobradamente resbaladiza es la menos indicada para dejar una camera y efectivamente en dos minutos oiga un trallazo… la camera por un lado y el objetivo por el otro. Se acerca otra pareja de rusos jubilados y el tipo se deja la camera de video sobre la misma superficie mientras intenta consolar el amigo de la camera… ante el próximo desastre me giro de espaldas y cuando doy la vuelta los cuatro miran por la borda con la esperanza de ver flotar la camera de video … realmente los humanos somos imprevisibles…
Y se pone el ferry en marcha. El paisaje es impresionante … aquí la piscifactoría de salmón una de las más importantes de la zona y principal industria de la ciudad y del país…. Allá unas minas cerradas en 199… pero que sigue habitada… aquí…
Y así hasta llegar a la “gruta de los prófugos”. Parece ser que en tiempos pasados unos se negaron a pagar los impuestos y por ello tuvieran que exiliarse en la cueva. Los persiguió la policía, pero se pudieron escapar tirando pedradas a la policía y subiendo el escarpado… bueno al menos esto era lo que me explicaba la informática que conocí en el barco…

De joven trabajaba en un software para hospitales, luego se pasó con el programa a la cruz roja y la enviaron para Suiza donde conoció su actual pareja… de esto hace muuuuchos años “…ahora solo espero jubilarme ya… estoy de la informática hasta los … todo el día llamándome con problemas” … ostras (? ¿) ¿No tenéis APQS? En Granollers, en el ayuntamiento, tenemos las apqs y los usuarios tienen que rellenar un formulario con su queja… no nos pueden llamar directamente… “… Pues oye es una buena idea … no te creas… los problemas no se rebajan…esperábamos que se redujeron en los años siguientes o al menos eso decía el jefe un tal Taulats … No,no creo que eso rebajara las incidencias … pues si tienes razón… no se rebajaban sino que aumentaban… carcajadas…
El ferry se acerca tanto a la citada gruta, que está más arriba en un cerro de la montaña, que casi toca las rocas…salidos de allí el barco sigue hasta otro enclave en el que vemos dos cabritas. Por donde habrían bajado…era imposible bajar hasta allí… pero claro son cabras e ya se sabe que pasan por donde uno menos se imagina … pero aun así… no tienen alas… El barco sigue deslizándose y se va hacia las cabritas… estas al vernos vienen corriendo hacia el barco… extraño … muuu extraño… el barco se acerca hasta tocar la base de la montaña, baja la rampa de desembarque y el capitán se enfila con una bolsa de pan que va tirando hacia las cabras que se lo cogen al vuelo.
Están gorditas y bien alimentadas … Pero pronto veo en las orejas de las cabritas las etiquetas de plástico de los corrales y en seguida me entran las dudas de si su acercamiento corriendo era por el pan o porque había llegado la hora de plegar y embarcar para el corral … Para mí que las cabritas son parte del guion del ferry para turistas ávidos de aventuras. El barco se aparta y las cabritas nos miran con aire apenado que de verdad te hacían saltar las lágrimas… me quejaba yo de las APQS… estas sí tenían un empleo malo… malo.
El barco sube la rampa y nos vamos más para el interior del fiordo… ahora surge una cascada impresionante que cae desde lo alto y de nuevo el barco se aproxima hasta casi tocar la roca… ¿qué hace este tipo? Y ahí aparece el capitán con un cubo metálico en mano y un extensor; coloca el cubo en la punta del extensor y lo llena de agua de la cascada. Le acompaña una supuesta capitana con las manos llenas de vasos … toca probar el agua de la cascada y los turistas rusos se precipitan hacia la misma ávidos de un sorbo de pura agua de cascada… a mí también me toca y la verdad … sabía a agua fría no muy diferente de la que tomaba del grifo del hotel. Por el objetivo de la camera oteo la inmensa montaña y lo alto de la cascada a ver si había algún truco o aparecía algún grifo, pero no… la cascada era real…
Saciada la sed seguimos para adelante y aparece la base del imponente pulpito del Preikestolen … impresionante … 500 metros de altura y parece tallado por la mano del hombre.
Dicen que tiene el trasero rajado y que algún día se desprenderá … si lo hace el tsunami será de campeonato …Lo miro y pienso ¿por qué demonios alguien quería sentarse en su borde haciéndose un selfie…? 49€ por el viaje.